Su riesgo de desarrollar ciertas enfermedades aumenta con la edad. Esto también se aplica a la salud ocular. Su visión suele empezar a disminuir a partir de los 40 años. Es posible que note que necesita más luz para ver, que no puede leer tan de cerca o que los colores no son tan intensos como antes.
La degeneración macular, el glaucoma, el desprendimiento de retina y las cataratas son enfermedades oculares frecuentes que presentan las personas mayores. Entender cada una de estas enfermedades oculares junto con sus signos de advertencia puede ayudarlo a saber cuándo programar una cita con un optometrista u oftalmólogo.
DEGENERACIÓN MACULAR
La degeneración macular es una enfermedad que afecta la mácula, que se encuentra en el centro de la retina. Esta parte del ojo es responsable de la visión central y enfocada. Aunque la degeneración macular rara vez causa ceguera total, puede disminuir la visión central, lo que dificulta que las personas afectadas conduzcan, lean o vean lo que las rodea.
En las primeras etapas, es posible que la degeneración macular no tenga ningún síntoma. A medida que avanza, la visión central puede comenzar a verse borrosa u ondulada, pero la visión periférica generalmente no se ve afectada.
Aunque la degeneración macular no tiene cura, algunos tratamientos pueden retrasar la progresión de la enfermedad. La cirugía con láser y las inyecciones de fármacos han demostrado ser exitosas. Además, las ayudas visuales, como las lupas, pueden ayudar a las personas a leer o mirar cosas de cerca.
Casi el 7 % de los estadounidenses mayores de 40 años tienen un grado de esta enfermedad. Además de la edad, otros factores de riesgo incluyen la presión arterial alta, la raza, los antecedentes familiares de degeneración macular y el tabaquismo.
GLAUCOMA
El glaucoma es una enfermedad ocular relacionada con la edad causada por un aumento de la presión en el ojo. Desafortunadamente, no es fácil saber cuándo tiene glaucoma, ya que las personas suelen presentar pocos síntomas tempranos o ninguno. Alrededor de un millón de personas podrían tener glaucoma y no saberlo.
Si el nivel de presión sube en el ojo, esto puede causar daño al nervio óptico, lo que puede provocar pérdida de la visión o ceguera total. A medida que la enfermedad avanza, puede causar algunos síntomas visuales, como una disminución de la visión lateral o periférica y un empeoramiento del estrechamiento concéntrico del campo visual.
Los medicamentos pueden ayudar a disminuir la presión en los ojos, algunos de los cuales se ofrecen en forma de pastillas y otros en forma de gotas oftálmicas. Pero, para algunas personas, los medicamentos no son suficientes para tratar la afección y necesitan cirugía.
Un tratamiento quirúrgico principal para el glaucoma es una trabeculectomía. Este procedimiento utiliza un láser para mejorar la forma en que el líquido puede salir del ojo, lo que reduce la presión, mientras que este último implica crear una nueva vía de drenaje debajo del párpado.
Además de la edad, otros factores de riesgo de glaucoma incluyen la miopía, el uso de medicamentos esteroides y los antecedentes familiares de la enfermedad.
DESPRENDIMIENTO DE LA RETINA
Si la retina se separa de su soporte en la parte posterior del ojo, el resultado es una afección conocida como desprendimiento de retina. A medida que las personas envejecen, el vítreo (líquido tipo gel) del ojo se encoge y cambia de textura.
Esto puede hacer que la retina se desprenda, lo que puede causar pérdida permanente de la vista y ceguera si no se trata de inmediato. Aunque el desprendimiento de retina no es doloroso, puede causar la aparición repentina de destellos de luz y partículas flotantes en el campo visual. Este síntoma no debería ignorarse.
Otros síntomas incluyen la pérdida de la vista o la sensación de que una sombra cubre los ojos. Un especialista en retina puede volver a colocar la retina en su sitio y restaurar la vista.
CATARATAS
Las cataratas son extremadamente frecuentes en la población de edad avanzada. El cristalino del ojo debería ser transparente, pero, con el tiempo, puede comenzar a nublarse, lo que provoca visión borrosa.
Las cataratas se forman lentamente y evitan que la luz pase por el cristalino hacia la retina. En algunos casos, una catarata puede mantenerse pequeña durante años y no requerir intervención quirúrgica. No obstante, cuando las cataratas se vuelven grandes o gruesas, pueden extirparse quirúrgicamente.
Durante la cirugía de cataratas, un oftalmólogo extrae el cristalino nublado y lo reemplaza por un cristalino de plástico transparente. Algunos pacientes optan por un lente con aumento que mejore su vista y, así, eliminar la necesidad de usar lentes de contacto o gafas/lentes.
Al comprender los signos y factores de riesgo de estas enfermedades oculares frecuentes relacionadas con la edad, puede estar mejor preparado en caso de presentar alguno de los síntomas. Tomar medidas preventivas también puede ayudar. Asegúrese de realizarse exámenes oculares periódicos para proteger su salud ocular y su vista.
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