En el mundo de la atención médica, se mencionan muchas siglas y términos desconocidos, lo que hace que las personas se sientan confundidas sobre lo que significan. Dos ejemplos de esto son la cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA, por su sigla en inglés) y la cuenta de gastos flexibles (FSA, por su sigla en inglés), que podría escuchar durante la inscripción abierta mientras decide qué tipo de cobertura desea seleccionar. A continuación, incluimos una descripción detallada de las HSA y las FSA para ayudarlo a comprender mejor sus diferencias y actuar con confianza.
¿QUÉ ES UNA HSA?
Una cuenta de ahorros para gastos médicos, a menudo abreviada HSA, por su sigla en inglés, es un beneficio que se ofrece junto con un plan de seguro de salud con deducible alto. Su empleador puede ofrecer una HSA o, si usted es un trabajador independiente, puede calificar para una HSA si tiene un plan de salud con deducible alto calificado.
Este tipo de cuenta de ahorros está diseñada para usarse en gastos de atención médica cubiertos. Puede aportar fondos no gravados a la cuenta a partir de sus ingresos brutos.
Los fondos de una HSA se pueden usar para una serie de gastos aprobados, entre ellos:
• Atención médica (p. ej., visitas al médico, hospitalizaciones)
• Gafas/Lentes
• Lentes de contacto
• Atención quiropráctica
• Medicamentos recetados
• Ciertos productos de venta libre
• Fisioterapia
• Terapia del habla
Cuando se utilizan para gastos médicos y de salud calificados, los retiros de una HSA están exentos de impuestos.
Existen límites de contribución a la cantidad que puede depositar en una HSA cada año. El límite actual es de $3,600 por persona y $7,200 por familia. Si tiene 55 años o más, puede depositar $1,000 adicionales en la cuenta por año.
¿Qué es una FSA?
Una cuenta de gastos flexibles o FSA, por su sigla en inglés, es otro beneficio que almacena dinero antes de impuestos para usar en gastos de atención médica calificados. Algunos empleadores también ofrecen un beneficio de FSA para la atención de dependientes, que permite a los padres o tutores reservar fondos antes de impuestos para usar en gastos de atención de dependientes calificados.
Los fondos de una HSA se transfieren de un año a otro, pero los fondos de su FSA deben gastarse dentro del año del plan o se pierde el dinero. Algunos planes ofrecen un período de gracia para usar los fondos de una FSA. El límite de contribución anual actual para una FSA es de $2,750.
Una FSA está disponible a través de un plan grupal, como un plan de salud ofrecido por un empleador, pero no está disponible para personas que trabajan por cuenta propia. El monto anual que asigne a su FSA estará disponible al comienzo del año del plan, y la suma se cubrirá con deducciones periódicas de la nómina.
El empleador que proporciona la FSA técnicamente es propietario de la cuenta, por lo que, si deja su trabajo antes de usar todos los fondos, no podrá llevarse el dinero con usted ni trasladarlo a otra cuenta.
DIFERENCIA PRINCIPAL
Una diferencia clave entre una HSA y una FSA es la posibilidad de transferir los fondos en una HSA. Los fondos de la HSA no vencen al final del año del plan, sino que pueden mantenerse en la cuenta de manera indefinida. Si su HSA se ofrece a través de su empleador, puede conservar el dinero porque es su dinero que ha apartado de su nómina.
CUÁL ELEGIR
El primer factor para tener en cuenta al decidir entre una FSA y una HSA es si usted califica para ambas. Para tener una HSA, debe estar inscrito en un plan de salud con deducible alto. Si no está en un plan que califica, no será elegible para una HSA. Del mismo modo, si es un trabajador independiente, no calificaría para una FSA.
Si reúne los requisitos para las dos cuentas, es útil considerar sus gastos de atención médica habituales. Si necesita atención médica considerable o le recetan medicamentos costosos, puede tener sentido elegir una FSA, ya que es probable que use todos los fondos.
Si tiende a estar en el extremo inferior de la utilización de la atención médica, podría elegir un plan con deducible alto con una HSA. Si no usa todo el dinero de la cuenta durante el año del plan, se transfiere al siguiente (y todos los años de allí en adelante).
Si tiene preguntas sobre sus opciones de cobertura del plan de salud, hable con su plan de salud para obtener más información. Tomar una decisión bien fundamentada durante la inscripción abierta puede ayudar a garantizar que tenga la cobertura que necesita para el próximo año.